DESAFÍOS 2008-CUBA: La economía precisa alimentarse

(IPS) – La mejora en la producción de alimentos es el principal reto de la economía cubana para este año, tanto por el impacto en el nivel de vida de la población como por haber sido uno de los temas recurrentes en los debates populares convocados por el gobierno en la segunda mitad de 2007.

"El sector está lejos aún de satisfacer la apremiante necesidad de colocar mayores cantidades de productos en los mercados para hacer bajar los precios", reducir importaciones y "propiciar un vuelco favorable en la opinión del pueblo", admite Osvaldo Martínez, presidente de la comisión de asuntos económicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento unicameral).

Según las autoridades, las dificultades del sector se agravan por los altos precios en los mercados internacionales de productos indispensables en la dieta familiar de esta isla caribeña. Debido a ello, el país gastó 286 millones de dólares adicionales en 2007, cuando la suma total de importaciones alimenticias fue de 1.500 millones de dólares.

Para asegurar la canasta básica que se vende a las familias con subsidio estatal, el gobierno prevé en 2008 un gasto de 945 millones de dólares. La distribución normada de alimentos (según una cartilla de racionamiento) garantiza algunos productos esenciales a todo ciudadano de este país, aunque se queda muy por debajo de satisfacer todas las necesidades.

"Entiendo que el país gasta mucho en la libreta, pero con esto sólo yo no alimento a mis hijos", comentó a IPS una mujer que hacía, adelantada, sus compras de enero. En su cesta cargaba arroz, azúcar, un litro de aceite y algunas pequeñas cantidades de frijoles negros y chícharos. "Este año no hubo nada adicional por fin de año", se quejó.

Como la mayoría de los cubanos, debe acudir al mercado libre, ya sea en moneda nacional o en divisas para completar las necesidades básicas de la familia. A ello dedica la mayor proporción de los ingresos familiares, que sumados a los del esposo redondean los 800 pesos mensuales. "Es que todo está muy caro", remató la mujer.

Esa cantidad equivale a unos 33 CUC o pesos convertibles, la única divisa de circulación permitida en el país. En las casas estatales de cambio (Cadecas), un CUC se compra a 25 pesos, moneda nacional o a 1,25 dólares estadounidenses.

En su informe al parlamento sobre la marcha de la economía en 2007 y sus proyecciones para 2008, el ministro de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez, indicó el 28 de diciembre que el nivel nutricional de la población llega actualmente a 3.287 kilocalorías y 89,9 gramos de calorías, "de lo cual entre 62 y 64 por ciento se ofrece a precios subsidiados".

Rodríguez señaló entre los retos para el año que comienza el de "avanzar en la sustitución de importaciones de alimentos como arroz, frijoles, leche, frutas y harina de trigo, así como pienso para los animales, entre los rubros con mayores posibilidades en lo inmediato". No detalló en qué cuantía se proyecta aumentar la producción de esos rubros.

Economistas y autoridades parecen coincidir en que es por el sector agropecuario que deben comenzar los cambios "estructurales y de concepto" previstos por el presidente en funciones de Cuba, Raúl Castro, el 26 de julio pasado en un discurso en el cual calificó de "imperativo" elevar la producción, en especial la de alimentos.

Sin embargo, el último y más importante período de sesiones del parlamento no dio aún luz verde a las esperadas reformas en esa área. Al respecto, Castro sólo reiteró que "el país trabaja con la urgencia que ese vital asunto requiere, por su impacto directo y cotidiano en la vida de la población, sobre todo de las personas de menores ingresos".

"Se ha avanzado en los estudios y continuará actuándose con toda la rapidez que permitan las circunstancias, para que la tierra y los recursos estén en manos de quienes sean capaces de producir con eficiencia, se sientan apoyados, reconocidos socialmente y reciban la retribución material que merecen", subrayó.

Tampoco hubo luz verde para la recuperación del poder adquisitivo de los salarios, aunque en su análisis de los resultados del año ante el parlamento, el diputado Martínez destacó que el sueldo medio en términos monetarios creció algo más de cinco por ciento y alcanzó 408 pesos mensuales.

En su opinión, llevar los salarios a niveles suficientes para satisfacer las necesidades del trabajador "es uno de los más importantes y complejos de los problemas a resolver de forma gradual, sostenible y sin esperar soluciones inmediatas y espectaculares".

Este año, la economía cubana creció 7,5 por ciento, dos puntos y medio porcentuales menos de lo pronosticado por las autoridades, en particular por la caída de la construcción y de la producción agrícola debido a "afectaciones climáticas a lo largo del año", según el ministro Rodríguez, quien proyectó para este año un aumento del producto interno bruto (PIB) de ocho por ciento.

Desde hace algunos años, el gobierno cubano realiza su medición de crecimiento económico mediante una fórmula de cálculo en la que se incluyen los servicios médicos, educativos y deportivos a la población mediante un valor ponderado del que no se han dado detalles. Tales servicios se ofrecen gratuitamente a toda la ciudadanía, sin importar su complejidad.

"Nos atenemos a sistemas estadísticos reconocidos internacionalmente y nuestro país reitera su derecho a que se reflejen limpiamente sus logros sin cortapisas ni cuestionamientos mal intencionados", sostuvo Rodríguez, adelantándose a eventuales nuevas críticas al respecto.

La carestía de los alimentos, debida en buena medida a la baja productividad del campo, y la insuficiencia de los salarios figuraron entre los problemas mayormente mencionados en los debates populares convocados por el gobierno en torno al discurso de Raúl Castro del 26 de julio, la más importante efeméride del proceso revolucionario de este país.

Raúl Castro gobierna interinamente desde el 31 de julio de 2006, cuando su hermano, el presidente Fidel Castro fue sometido a la primera de varias operaciones por una dolencia de origen intestinal de la cual aún convalece.